La noche del 31 de Marzo de 1578, Lunes de Pascua, cerca del Alcázar Real cabalga hacia su residencia Juan Escobedo, el secretario personal de Don Juan de Austria y el hermanastro del rey.
La escolta que llevaba alumbraba el camino, Escobedo que iba pensando en la cita que había tenido con Brianda de Guzmán no iba pendiente de quien había en la calle y los escoltas no hicieron su trabajo como deberían.
Porque en un tiempo donde las espadas y las capas escondían las intenciones de sus portadores había que estar más pendientes de la vida de uno; la oscuridad es mala consejera y sobre todo si estas enfrentado con la segunda persona más poderosa de un Imperio, en este caso Antonio Pérez, secretario personal del Rey Felipe II.
Cuando la comitiva dobló la esquina de la calle Camerín de Nuestra Señora de Atocha, de la oscuridad aparecen de golpe tres sicarios que ponen en guardia a los escoltas y a Escobedo, pero ya es demasiado tarde, Insaustí atraviesa al secretario del gobernador de Flandes de una estocada cayendo de forma fulminante al suelo mientras los otros dos, Rubio y Bosque hacen lo que pueden para deshacerse de los escoltas. Entonces todos huyen con el trabajo hecho, Juan Escobedo ha sido asesinado.
Estudiando un poco el porqué de este homicidio, es interesante que si ahora hubiera la misma impunidad, más de un mandatario estaría en la misma situación.
Resulta que este hombre que había estado muy bien relacionado por estar
emparentado con la Princesa de Éboli y por ese motivo fue puesto bajo las órdenes de Don Juan de Austria por Antonio Pérez, para vigilar a este y descubrir cuales eran sus intenciones, pues el monarca recelaba de su hermano.
Pero el tiro le salió por la culata pues Escobedo se volvió tan fiel a Don Juan de Austria que veló por sus intereses de tal forma que se enemistó con Pérez.
Este Pérez, hombre disoluto y corrupto, estaba jugando a dos bandas de tal forma que unas veces ayudaba a los rebeldes holandeses, otras veces a los ingleses y algunas veces a los españoles favoreciendo solo a sus intereses, a pesar de que algunos desfavorecían por completo a su rey y patria siendo algunos de ellos su relación con la Princesa de Éboli, engañando así a Felipe II ya que el monarca estaba encaprichado con esta y como vosotros sabéis esto era vox populix.
Así que cuando el Rey negó los fondos para pagar a las tropas acantonadas en Flandes y el refuerzo de estas mediante más efectivos hizo que Escobedo buscara la solución y la forma de convencer a Pérez descubriendo el doble juego del Secretario Real.
Así que mediante una conversación entre ellos el enfrentamiento no se hizo esperar y Escobedo amenazó a Pérez que sí no apoyaba la invasión de Inglaterra por Don Juan de Austria liberando a María de Tudor y casándose con ella por lo que destronarían a Isabel I restaurando la Fe Católica, divulgaría toda la corrupción acumulada por este.
Entonces Antonio Pérez hizo que este regresara de Flandes, no se sabe porque motivo, pero según la versión oficial el rey estuvo de acuerdo con el asesinato.
Antonio Pérez creía haber resuelto el problema manteniendo su juego a salvo junto con la confianza del monarca que quedaría intacta. Pero Don Juan cayó en desgracia total muriendo en Octubre de este mismo año, 1578, despidiéndose de su hermano por carta y pidiendo que respetase la decisión de haber nombrado a su sobrino como gobernador de Flandes ya que velaría por los intereses del monarca con el mayor de los celos.
Aquí se dio cuenta el rey de la lealtad de su hermano y comenzó las sospechas hacia Antonio Pérez.
Si el rey hubiera hecho caso de su hermano, posiblemente la historia se estuviera escribiendo de otra forma.
Bibliografía:
http://www.nationalgeographic.com.es/historia/grandes-reportajes/la-conjura-de-antonio-perez_7116
http://blogs.elconfidencial.com/alma-corazon-vida/empecemos-por-los-principios/2013-07-27/no-se-puede-enganar-siempre-a-todo-el-mundo-el-asesinato-de-juan-de-escobedo_13090/
https://mysteriouswaydotorg.wordpress.com/tag/la-muerte-de-juan-de-escobedo/
La escolta que llevaba alumbraba el camino, Escobedo que iba pensando en la cita que había tenido con Brianda de Guzmán no iba pendiente de quien había en la calle y los escoltas no hicieron su trabajo como deberían.
¿Por qué?
Porque en un tiempo donde las espadas y las capas escondían las intenciones de sus portadores había que estar más pendientes de la vida de uno; la oscuridad es mala consejera y sobre todo si estas enfrentado con la segunda persona más poderosa de un Imperio, en este caso Antonio Pérez, secretario personal del Rey Felipe II.Cuando la comitiva dobló la esquina de la calle Camerín de Nuestra Señora de Atocha, de la oscuridad aparecen de golpe tres sicarios que ponen en guardia a los escoltas y a Escobedo, pero ya es demasiado tarde, Insaustí atraviesa al secretario del gobernador de Flandes de una estocada cayendo de forma fulminante al suelo mientras los otros dos, Rubio y Bosque hacen lo que pueden para deshacerse de los escoltas. Entonces todos huyen con el trabajo hecho, Juan Escobedo ha sido asesinado.
¿Qué relevancia tiene este asesinato?
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| La Princesa de Éboli |
Resulta que este hombre que había estado muy bien relacionado por estar
emparentado con la Princesa de Éboli y por ese motivo fue puesto bajo las órdenes de Don Juan de Austria por Antonio Pérez, para vigilar a este y descubrir cuales eran sus intenciones, pues el monarca recelaba de su hermano.
Pero el tiro le salió por la culata pues Escobedo se volvió tan fiel a Don Juan de Austria que veló por sus intereses de tal forma que se enemistó con Pérez.
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| Antonio Pérez |
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| Felipe II |
Así que mediante una conversación entre ellos el enfrentamiento no se hizo esperar y Escobedo amenazó a Pérez que sí no apoyaba la invasión de Inglaterra por Don Juan de Austria liberando a María de Tudor y casándose con ella por lo que destronarían a Isabel I restaurando la Fe Católica, divulgaría toda la corrupción acumulada por este.
Entonces Antonio Pérez hizo que este regresara de Flandes, no se sabe porque motivo, pero según la versión oficial el rey estuvo de acuerdo con el asesinato.
Antonio Pérez creía haber resuelto el problema manteniendo su juego a salvo junto con la confianza del monarca que quedaría intacta. Pero Don Juan cayó en desgracia total muriendo en Octubre de este mismo año, 1578, despidiéndose de su hermano por carta y pidiendo que respetase la decisión de haber nombrado a su sobrino como gobernador de Flandes ya que velaría por los intereses del monarca con el mayor de los celos.
Aquí se dio cuenta el rey de la lealtad de su hermano y comenzó las sospechas hacia Antonio Pérez.
Si el rey hubiera hecho caso de su hermano, posiblemente la historia se estuviera escribiendo de otra forma.
Bibliografía:
http://www.nationalgeographic.com.es/historia/grandes-reportajes/la-conjura-de-antonio-perez_7116
http://blogs.elconfidencial.com/alma-corazon-vida/empecemos-por-los-principios/2013-07-27/no-se-puede-enganar-siempre-a-todo-el-mundo-el-asesinato-de-juan-de-escobedo_13090/
https://mysteriouswaydotorg.wordpress.com/tag/la-muerte-de-juan-de-escobedo/
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